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Discurso de Jesús Muñoz (texto y vídeo), Jefe de Comunicacion y Prensa del Sindicato TNS, en el acto de Homenaje a los Caídos del Cuartel de la Montaña y demás víctimas de los crímenes del Frente Popular del siglo XX y el del XXI.

 

Buenas tardes compatriotas,

Como es de bien de nacido ser agradecido, quiero comenzar mostrando públicamente mi agradecimiento a la Hermandad Nacional de la Vieja Guardia y a La Falange por haberme brindado la posibilidad, el inmenso honor, de estar un año más aquí arriba, al otro lado del micrófono y al lado de este monumento que a la inmensa mayoría de los que pasan a diario o como turistas por aquí no les dice absolutamente nada, pero que a nosotros nos debe hacer reflexionar profundamente, porque este caído y estos sacos terreros que tengo a mi espalda y que si Dios y los patriotas no lo remediamos, muy posiblemente algún funcionario municipal pronto destrozarán con una maza, eso sí, muy democráticamente, este caído y estos sacos terreros representan una época de España, unas actitudes de unos compatriotas nuestros, hoy difíciles de encontrar y que no debemos olvidar porque todo ello, tanto esa época de hace más de 80 años, como esas actitudes y como esos compatriotas, aparte de nutrir y ser la esencia del pasado glorioso de España, nos ayudan a comprender el presente y, sin duda, nos deben ayudar a forjar un futuro a construir.

Y desde aquí arriba es un honor contribuir humilde, pero sentida y emocionadamente en este más que merecido homenaje que hoy se está brindando a los Caídos en el Cuartel de la montaña, pero también con ellos a todos aquellos represaliados por la “democrática y ejemplar” II República y sus milicias democráticas del Frente Popular, que no sólo fueron perseguidos, asesinados o torturados por aquellos democráticos defensores del Muera España, Viva Rusia, sino que además nos los presentan, a los masacrados, como los malos de la película, mientas los buenos son aquellos que torturaban, violaban, saqueaban, ultrajaban y asesinaban, todo ello muy democráticamente también, con el beneplácito y el apoyo de unos dirigentes políticos de todas las instituciones y partidos que ahora los encumbran a los altares democráticos y que son cómplices, descendientes y hasta dirigentes actuales, de otras organizaciones criminales y asesinas de los últimos 45 años, y, por lo tanto, también queremos honrar hoy a esas otras víctimas del socialismo y el comunismo, incluidas aquellas que han sido cruelmente abandonadas hasta su muerte en los últimos meses.

 

Porque si ya teníamos razones más que de sobra durante las últimas décadas para intentar derribar este sistema que nació con las manos manchadas de sangre y con muchos muertos en su pasado y su trastienda, con todo lo ocurrido estos meses últimos con la formación de un nuevo gobierno del Frente Popular versión siglo XXI, traído de la mano por un gobierno pepero anterior tan funesto como el actual, con unos socios de gobierno terroristas y separatistas (valga la redundancia) y que representan fielmente, todos ellos, a los culpables de los genocidios socialistas y comunistas, ahora también hay otro gran número de españoles fallecidos recientemente a los que queremos homenajear y que si están muertos, nosotros no nos vamos a andar con ambages, son en su inmensa mayoría por la gestión criminal de un gobierno y unas instituciones que, en el mejor de los casos, no han hecho nada por evitar sus muertes, eso si no han ejecutado una eutanasia general, y que han utilizado todo lo relacionado con la llamada crisis del coronavirus para sus siniestros objetivos, políticos, sociales y económicos dentro de su proyecto de ingeniería social.

Sin entrar en profundidad en todo lo que ha representado el estado de Mazmorra que el actual gobierno criminal nos ha impuesto con sus aliados convencionales de derecha e izquierda, según los iba necesitando para mantener su plan, lo que sí creo necesario destacar hoy es la pérdida de libertad a la que nos han sometido y nos están sometiendo.

Porque es evidente que hemos perdido libertad, buena parte de la que nos quedaba que no era tanta como nos decían, ya que el sistema antes de la pandemia te decía lo que tenías qué consumir, qué hacer, qué leer, qué ver, qué escuchar, qué decir y hasta qué pensar, pero al menos había cierto margen para la disidencia, disidencia que ya era satanizada, censurada y reprimida pero con cierta libertad de movimientos que aún no eran considerados ilegales, aunque cada vez había más legislación represora contra los de siempre, más jueces dispuestos a aplicarla y más prensa del sistema servil y lacayuna encantada de jalearlo para que el pueblo reconociera como muy peligrosos y como sus enemigos a compatriotas que osaban romper los dogmas de lo políticamente correcto.

Hay infinidad de ejemplos, pero solo voy a enumerar tres.

Todo lo relacionado con la ideología de género, quien se opone a ella automáticamente era etiquetado ya para siempre de machista y homófobo y hay leyes que lo castigan.

Todo lo relacionado con la inmigración-invasión quien se oponía a ello inmediatamente era tildado de racista y xenófobo y hay leyes que lo castigan.

Y todo lo relacionado con la defensa de ciertas ideologías, ideologías socialpatriotas, en España falangismo, franquismo, etc, y fuera de España fascismo o nacionalsocialismo y la prueba es que la ley de memoria histórica está vigente y quien dice verdades históricas será catalogado como fascista y la ley lo persigue. De hecho, no nos extrañaría nada que pronto haya una nueva ley de memoria histórica que diga que el Gobierno frentepopulista del año 2020 gestionó maravillosamente la crisis de la pandemia y esa será la verdad oficial como nos han impuesto su verdad en otros temas históricos, en casi todos los del siglo XX.

Pero con la pandemia la pérdida de libertades se ha extendido a límites que nos parecían imposibles de admitir hace solo cinco meses y que el pueblo español ha tragado como traga con todo. Nos han regalado miedo y ahora nos venden seguridad, pero esa seguridad ficticia hay que comprarla no sólo con dinero, que también, sino con libertad. El control absoluto en algunos aspectos ha venido para quedarse mientras en otros irán soltando la cadena poco a poco para que creamos que somos libres y sigamos aplaudiendo a este régimen de libertades que nos hemos dado.

Si hace cinco meses alguien nos dijera, a cualquiera de nosotros, que un gobierno con el apoyo de TODO, repito, TODO el sistema nos iba a impedir salir a la calle, ver a nuestra familia, ir a la Iglesia, bueno, a las mezquitas sí se podía ir, ir a trabajar, ir a clase, visitar a nuestros enfermos, acudir a los entierros de nuestros muertos a los que se les ha obligado a morir en soledad precisamente por coronavirus o por otras causas, que nos iban a obligar a cerrar negocios, a suspender actividades de todo tipo, a delatar a quien se revelaba contra este liberticidio, a bloquear nuestras redes sociales… y todo esto con más de 28.000 muertos oficiales que pueden ser casi el doble y que parece que no son culpa de nadie, y una España destrozada social y económicamente y mientras están modificando leyes a su antojo a golpe de decreto ley, si nos dijeran en el febrero pasado que todo esto iba a ocurrir, a quien simplemente lo insinuara, le llamaríamos loco peligroso, lo tildaríamos de conspiranoico y posiblemente le encerrarían.

Este control absoluto que nos han impuesto ha venido para quedarse con ciertos matices y lo que es peor, con la connivencia de la inmensa mayoría del pueblo español cuyo parecido con el pueblo español de las grandes gestas es mera coincidencia. Y el pueblo lo aceptará todo porque le dirán que es por su bien y ante todo hay que hacer lo que nos dice nuestra democracia y nuestra globalización, y porque lo contrario a esta democracia y esta globalización es barbarie, aunque sea evidente que esta pandemia ha llegado, se ha quedado, y ha destrozado, por ejemplo, España por culpa de esta democracia y de esta globalización.

Han practicado un experimento que les ha salido perfecto, nos tuvieron 100 días en arresto domiciliario y la gente sequía aplaudiendo a las 8 de la tarde, aplaudiendo no sólo a los sanitarios que habían pedido en infinidad de veces que menos aplausos y más denuncia de la pésima y criminal gestión del Gobierno y todos sus cómplices de los que ellos también son víctimas, sino aplaudiendo también a sus secuestradores. Y ahora, con la historia de los rebrotes vuelven a la carga y el pueblo sigue tragando.

Si alguien no sabía lo que se siente cuando se padece el síndrome de Estocolmo que se mire en el espejo, porque la inmensa mayoría del pueblo español ha tenido, y algunos continúan hoy, con el síndrome de Estocolmo.

Porque, durante los meses que se ha mantenido el estado de excepción travestido de estado de alarma, las razones de mantener este estado de alarma con el que nos vuelven a amenazar ahora, no eran combatir el coronavirus, sino mantener tres pilares fundamentales para el Gobierno y sus cómplices para salvar el culo y para cumplir sus objetivos.

Resumiéndolo mucho, primero quería prolongar su dictadura frentepopulista para seguir robándonos libertades, algo muy habitual en los regímenes soviéticos que tanto les gustan. Si le robas la libertad al ser humano con la excusa de que es por su bien, puedes hacer con él lo que quieras porque, por un lado, le conviertes en un esclavo que o bien admite su situación y no lucha, o bien ni siquiera reconoce que es esclavo.

Segundo, querían aprobar leyes y medidas de otra índole, aparte de las relacionadas con el coronavirus, sin discusiones parlamentarias ni posibilidad de que hubiera réplicas en las calles e irían controlando cada vez más a los medios de comunicación y las redes sociales.

Y tercero, querían retrasar lo más posible que se hiciera justicia con su criminal comportamiento a la vez que se preparaba el terreno desviando la atención en otros temas, se le echaba la culpa a otros, se manipulaban datos y se nos entretenía con la nueva normalidad, que será otra forma de hacernos esclavos.

Y lo han conseguido todo, eso sí, con algunas protestas, en los que los falangistas y otros patriotas hemos participado, protestas que en su inmensa mayoría han terminado en cuanto se han abierto las terrazas, la gente ha podido irse de vacaciones y ha vuelto el fútbol.

Y estamos en el momento actual con los problemas que ya padecíamos en España en el mes de febrero a los que hay que sumar esta losa de todo lo que ha supuesto, supone y supondrá el coronavirus en nuestra querida España. La España golpeada por un virus mortal al que hay que derrotar que es este sistema podrido que todos de alguna manera veneran y pretenden mantener y que es el régimen del 78.

Ese virus mortal que continúa golpeando España y que tiene muchas y variadas ramificaciones, empezando por la monarquía de los Corinos y los Letizios de la que tanto se habla últimamente como si fueran nuevas sus borbonadas, sus negocietes, sus golfadas, sus corruptelas, sus perjurios, sus traiciones varias, traiciones a los españoles en general, y en particular a aquellos a los que le deben su trono y su corona, les dieron educación y formación, medios materiales y económicos, los que le regalaron una jefatura del estado y les instauraron una monarquía a su medida pese a que se su dinastía se había ido cobardemente de España en lugar de luchar por ella, y que en borbónico agradecimiento firmaron la sectaria y siniestra ley de Memoria Histérica o la profanación de la tumba del General Franco del Valle de los Caídos, esa monarquía borbónica, por la que yo no se vosotros, pero este que está aquí palabrita de niño Jesús que no moverá un dedo si definitivamente cae, ya que como decía José Antonio no podemos lanzar el ímpetu fresco de la juventud que nos sigue para el recobro de una institución que reputamos gloriosamente fenecida”.

Jefatura del Estado que además continua gustosa con su sometimiento a las directrices de las logias y los centros de poder de siempre, y lo hemos visto meridianamente en ese aquelarre masónico del 16 julio en el que los enemigos seculares de España han dejado su sello en lo que han presentado como un homenaje a las víctimas del coronavirus y en el que sólo ha faltado que un gran Maestre de la logia de turno con su mandil, su escuadra y su compás arrojara un bebé al pebetero en esa ceremonia satánica que culminaba el genocidio cometido con decenas de miles de españoles mientras buena parte de los culpables allí estaban, a unos metros de aquí, en ese círculo masónico formado por los criminales y sus cómplices.

Ese virus mortal llamado Régimen del 78 que continúa golpeando España y que entre otras de sus muchas y variadas ramificaciones tenemos todo lo relacionado con el separatismo mimado, subvencionado y apoyado por TODAS las instituciones del régimen del 78. Sí, apoyado con legislación a su favor, con dinero público, con la entrega en bandeja de la educación, de la manipulación de los medios de comunicación, de la cultura, de la administración de justicia, del desmantelamiento absoluto de las FAS, de convertir a un pueblo ejemplar, el español, en una manada borreguil que salvo contadas excepciones no reacciona ni cuando le roban, ni cuando le violan ni cuando le matan. Y que cuando reacciona como lo hizo hace 3 años contra el separatismo que declaró la independencia unilateralmente o como hace 23 años con el asesinato de Miguel Angel Blanco a manos de otros separatistas, los de ETA, cuando ese pueblo reacciona ya se encarga el sistema de reconducir la situación y encabezar las pancartas no para combatir a los enemigos de España y hacer justicia, sino para frenar al pueblo, para mandarlo a casa y para decirle que ya se ocuparán de todo los tribunales y los parlamentos, como si los tribunales y parlamentos no estuvieran trufados de traidores, de corruptos, de prevaricadores y de enemigos sectarios de la Patria.

Ese separatismo protegido por las instituciones del sistema que libera a los terroristas y los separatistas (valga la redundancia) y los sienta en los escaños de sus distintos parlamentos para que pongan y quiten gobiernos de la España que odian y asesinan. Da igual que hayan asesinado a miles de españoles como los etarras y hayan dejado un dolor y sufrimiento infinito, o que hayan dado un golpe de estado separatista contra la nación española. El régimen les permite gobernar, seguir asesinando a España desde esas instituciones y les premia no sólo con más prebendas y más financiación, sino también con el ejercer la represión contra los patriotas de verdad, los únicos que les hacen frente. Por eso, el mismo Tribunal Supremo que no vio delito de rebelión en el golpe separatista de hace tres años y como consecuencia ya están en libertad todos sus autores, algunos recientemente y otros lo han estado siempre, multiplicó por 8 una sentencia ya injusta de 6 meses contra los patriotas de Blanquerna, y los condenó a 4 años de prisión por defender la sagrada unidad de España en un acto separatista y golpista que se estaba celebrando en lo que los hispanófobos denominan la embajada de Cataluña en Madrid. Ese Tribunal Supremo que en unos días dictará su nueva sentencia que posiblemente sea una nueva concesión al separatismo y un nuevo ataque al patriotismo: ¡GLORIA ETERNA A LOS DE BLANQUERNA!

Ese virus mortal que continúa golpeando España y que entre otras de sus muchas y variadas ramificaciones tenemos también todo lo relacionado con la injusticia Social galopante que ahora se verá incrementada con la criminal gestión del corona virus que está causando y va a causar una trágica crisis económica y social sin precedentes. Pero tranquilos, que todo lo relacionado con la injusticia social lo va a solucionar el PPverde con su nuevo sindicato. Es paradójico, por no decir de chiste, que el partido cuyo presidente no ha trabajado jamás en su vida cree un sindicato. Y no contentos con copiar frases de nuestros fundadores, de copiar las frases de nuestros mensajes, nuestros discursos y nuestras consignas, ahora copien el nombre de aquel sindicato polaco de Lech Walesa que yo creo que de liberal tenía poco. Pues aquí nos tienen a los nacional sindicalistas deseando debatir con ellos sobre el liberalismo y el capitalismo que ellos elogian, el poder de la usura sionista que les financia, la nacionalización de la banca, del crédito y los sectores esenciales, la defensa de lo nacional frente a sus privatizaciones, la salida del euro  y de la siniestra Unión Europea...Cuando quieran ya saben donde estamos.

Ramificaciones como el aborto que asesina a 100.000 niños al año, vidas que no importan a nadie, no como las BLACK. Ramificaciones que promueven ideologías tóxicas y de enfrentamiento entre españoles como el feminismo cuyas manifestaciones además resultaron ser una bomba vírica este 8 de marzo o las del poderoso y llorón colectivo maricabollerotravelo, perdón lobby LGTBI. Ramificaciones como la inmigración-invasión que es un problema gravísimo en sí mismo y potencia todos los demás. Ramificaciones como el odio a nuestra historia, nuestra cultura, nuestro idioma, nuestras tradiciones, nuestra fe, nuestra identidad, odio enfermizo que en estos días se ve acrecentado con movimientos supuestamente antirracistas y que en realidad son ataques racistas antiblancos e hispanófobos y anticatólicos dirigidos y subvencionados por Soros y otros de su calaña. Ramificaciones como el sometimiento a organizaciones ajenas y antiespañolas que nos roban toda nuestra soberanía como la Unión Europea que en estos días vemos además como nos trata y como nos quiere exprimir aún más.

Ramificaciones como la aplicación de la Memoria histórica actual y sus próximas ampliaciones por las que los distintos asesinos y genocidas del frente popular, comunistas, socialistas, anarquistas y separatistas, la ETA, el GRAPO, el FRAP (del padre del marqués de Galapagar y del orondo vividor Esteban Ibarra), no sólo han dejado o dejarán de ser oficialmente lo que son, unos asesinos y enemigos de España, sino que, como decía antes, los malos serán sus víctimas. Por cierto, ha pasado ya más un año de la recuperación por parte de la derecha del tripartito derechista del PP multicolor azulito, naranja y verde de algunas alcaldías que tenía la extrema izquierda, y esos nuevos gobiernos municipales no han devuelto ni una sola placa ni estatua arrebatada a héroes y españoles ilustres en nuestras calles, por ejemplo, aquí en Madrid, pese a haber hecho bandera de ello para ganar votos y pese a haber sentencias que así lo indicaban. ¡Qué raro, se les habrá pasado!, como se les pasó en las otras veces que cogieron el poder de manos de la izquierda que ya había quitado placas y estatuas hace unas décadas y entonces no había ley de memoria Histórica.

Estas que acabo de enumerar son, entre otras, las ramificaciones de ese virus letal que sufre España, llamado régimen del 78 y que han convertido en armas a utilizar los enemigos de España, esa patria común que quieren destruir y que nos intentan arrebatar a todos los españoles, a los de hoy, a los de ayer y sobre todo a los del mañana. Esa España, de la que nos sentimos herederos no puede esperar más tiempo a ver si la salva alguna institución cómplice de todo lo que le ocurre, desde la traidora monarquía borbónica a la última de las instituciones que no se cuál será, pero que seguro que también mantenemos con nuestros impuestos y que seguro estará también trufada de corruptos y traidores.

Esa España no puede esperar a ver si la salva algún milagro divino,…los milagros, queridos camaradas, hay que ganárselos.

Y, por eso, aunque suene a tópico, el mejor homenaje a los Caídos del Cuartel de la Montaña, a los represaliados por el Frente Popular, el del siglo XX y el del XXI, el de las bandas terroristas socialistas, comunistas y separatistas, es, sin duda, seguir su ejemplo, el luchar cada uno de nosotros día a día, en la medida de las posibilidades de cada uno, pero luchar. Posibilidades que, por cierto, siempre son más de las que creemos que son, y sobre todo no dejar esa lucha porque creamos que nuestra aportación es pequeña o poco útil, y esa lucha debe pasar ineludiblemente hoy por el apoyar y militar en las organizaciones patriotas, ya que veo dirigentes y militantes de varias de ellas hoy aquí, y estoy encantado de ello y orgulloso de poder decirlo ante ellos, el luchar contra el enemigo común que es este sistema injusto, corrupto y antiespañol que padecemos, el luchar hombro con hombro a la vez que se liman asperezas entre los patriotas, que, tal y como se están sucediendo los acontecimientos, posiblemente tengamos, próximamente, que compartir trinchera, o calabozo, o módulo penitenciario, o fosa común, porque el enemigo, como ha demostrado muchas veces, no hace distingos entre nosotros.

Aquí mismo, hoy hace 84 años lucharon juntos, sangraron juntos, pasaron miedo juntos, murieron juntos o luego fueron encarcelados y asesinados posteriormente juntos, patriotas de muchas procedencias tanto geográficas como ideológicas, muchísimos de ellos falangistas como yo y como muchos de los que estáis ahí, pero también había militares sin más ideología política que su amor a la Patria que podían haberse rendido o escapado y no lo hicieron, había civiles patriotas, no necesariamente falangistas, que les dolía España como os puede doler a vosotros, que podían haberse ido de Madrid, o por lo menos no acercarse por aquí ese día, y decidieron entrar en el Cuartel de la Montaña para luchar y morir por lo que creían, sabiendo muchos de ellos que el Alzamiento en Madrid posiblemente no iba a triunfar.

Y su ejemplo valió, vaya si valió, no sólo por aquello de que ante Dios no hay héroes anónimos, sino porque cada Caído por Dios y por España en este suelo y en otros de los campos y pueblos y ciudades de nuestra patria que se regaron con su sangre, se convirtió en un empuje brioso en la moral de cada combatiente que siguió luchando por la Victoria de España contra la Anti España hasta que esa Victoria se produjo en toda la nación.

Por eso es imprescindible que seamos nosotros los patriotas quienes portemos la vacuna contra ese virus letal que es este sistema, virus letal ante el que hay una única vacuna, la lucha por la Patria, por la Justicia Social y por la dignidad de la persona y que llevemos a cabo esa lucha con unidad, con militancia y con compromiso.

Y si queréis luchar, hoy, al marcharos a casa decíos a vosotros mismos que no vais a bajar los brazos y que este sistema repugnante no va a poder con vosotros, ya que sois mil veces mejores que aquellos que os quieren quitar de en medio, aquellos que os calumnian, que os reprimen, que os persiguen...y lo hacen porque sois idealistas, porque sois valientes, porque sois peligrosos, porque tenéis muy presentes y a flor de piel el amor,..

Sí, he dicho el amor, el amor a la Patria, el amor a la Verdad, el amor a la Justicia, el amor a vuestra Fe, el amor a vuestra Tradición, el amor a vuestra Familia, es decir todo lo contrario a lo que son y sienten aquellos que os persiguen.

Id hoy a casa camaradas y compatriotas, vayamos a casa, como os decía antes, convencidos de que si lucháis, si luchamos, no van a poder con nosotros, de que si luchamos seremos dignos herederos de aquellos compatriotas que cayeron por España, y por lo tanto por todos nosotros, hace ahora más de 80 años. Se lo debemos a ellos, nos lo debemos a nosotros mismos y se lo debemos a España.

Compatriotas, camaradas, por España, su sagrada unidad y la Revolución Nacional Sindicalista que traiga Pan, Patria y Justicia a los españoles, gritad conmigo:

 

¡CAIDOS DEL CUARTEL DE LA MONTAÑA!

¡PRESENTES!

 

¡CAIDOS POR DIOS Y POR ESPAÑA!

¡PRESENTES!

 

¡ARRIBA ESPAÑA!

 

Video del Homenaje a los Caídos del Cuartel de la Montaña y demás víctimas de los crímenes del Frente Popular del siglo XX y el del XXI

 
El mejor homenaje es la lucha
 
Y la lucha hoy significa Militancia, Unidad y Compromiso
 
¡Presentes!
 
¡Arriba España!