Imprimir
Categoría: Artículos
Visto: 1172
Inicio desactivadoInicio desactivadoInicio desactivadoInicio desactivadoInicio desactivado
 

No hay texto alternativo automático disponible.

Hay dos grandes diferencias ideológicas entre el socialismo de la guerrilla kurda del PKK y la izquierda europea y occidental. Mientras la segunda es internacionalista y por tanto aniquiladora de todo nacionalismo, los kurdos hacen de la defensa de su identidad y tradición bandera de lucha. La segunda gran diferencia es el ateísmo de la izquierda progre europea frente al teísmo, creencia en Dios, aunque respetando la libertad religiosa, de los kurdos.

 

El Kurdistán está inmerso en la cuna de la civilización que fue Mesopotamia, entre el Tigris y el Eufrates donde nacieron grandes civilizaciones y varias religiones. Los kurdos herederos del Mazdeizmo de Zoroastro o Zarathustra, como los yazidies y otras sectas, tienen una gran influencia místico-religiosa que se nota en su idiosincracia particular.

Los kurdos son un pueblo extremadamente conservador y tradicional, no aceptando innovaciones y confrontando la "modernidad" que vinculan al capitalismo, así como a otros males que afectan a toda sociedad tradicional. En su folklore, cosmovision del mundo, e ideología, se vislumbra la influencia que, los seguidores de Aura Mazda dejaron en la zona. No en vano aprecian tanto la obra de Nietzche, que como en su libro "Así habló Zarathustra", remarca la ideología de un socialismo como principio de convivencia, no ausenté de divinidad ni de transcendencia, aunque ajeno a lo que el filósofo acusó, de debilidad del cristianismo preocupado más del rito, o la adoración que de las obras.

"Oh Mazdā! Que todo aquello que el ser humano debe hacer para ser digno de tu Amor y Misericordia, que todo ello lo realicemos. Los nobles pensamientos, palabras y actos por los que otorgas a los seres humanos pureza del alma, inmortalidad, rectitud y dicha eterna, todo ello te lo ofrecemos a Ti, ¡oh Mazdā Ahurā! Yasna 34,1"

Zoroastro que fundó su religión "maniquea" entre 1.500 y 3.000 años A.C. se enfrentaba al politeísmo de la época, anunciando la existencia de un solo y único Dios, creador de todo. Y dos principios enfrentados que alumbraban todas las obras, uno bueno, Ormuz, y otro malo, Arimam. También insistió en que la verdadera forma de acercarse a Dios eran las obras, y no los rituales ni oraciones.

"Se esforzó en liberar la religión de la ignorancia asociada a los distintos dioses tribales. Quiso unir a todos, no sobre la base de sus creencias o de su condición social, sino sobre la base de sus buenos pensamientos, palabras y obras, y de su compromiso y amor por la humanidad y la creación."

Es gracias a esa influencia el gran respeto que se tiene a la religión que cada cual profese, viéndonos combatiendo en la misma trinchera musulmanes, yazidies, cristianos, e incluso kakais, o agnósticos.

Es también gracias a esa influencia de la religión de la moral y rectos pensamientos, palabras y obras, que no hay cabida a degenerados, desviados, o amorales. Todas esas tendencias que aquí están desterradas, son precisamente las que abanderan la izquierda europea, asocial, inadaptada, incendiaría, liberal y progresista.

Como cristiano y, por tanto, convencido de la existencia de una única y verdadera Fe, pero conocedor de que la Fe no se impone por la espada, sino por el amor y el ejemplo. No puedo menos que respetar y agradecer a quienes defienden la libertad religiosa en la zona. Libertad amenazada por un islamismo radical enemigo de toda la humanidad, como estamos viendo en los diversos atentados que recorren el mundo, y que bajo el grito de Alah Akbar, siembra el odio y el terror por doquier.

Una cosa es la libertad religiosa, que puede ser un derecho social fundamental, y otra el sincretismo teosófico o masónico, o lo que es peor el indiferentismo que aún desde las más altas instancias católicas se fomenta. Es condición indispensable para la convivencia en paz, el respeto, que no significa asumir como verdadera o equiparable, a otras religiones. Cosa que parece impensable para los que faltos de argumentos o verdadera convicción, tratan de convertir bajo la amenaza, coacción y terror.

"Que ninguno de vosotros escuche las palabras y las instrucciones del mal, porque él trae pena y destrucción a la casa y al clan, al pueblo y al país. Resístete pues a él con fuerza. Yasna, 31-18"

He descubierto grandes diferencias entre los seguidores de APO, y los perroflautas que abanderan el socialismo en España. Frente a la moral de unos, el libertinaje de otros. Contra el amor a la identidad y nacionalismo de los kurdos, el apátrida desarraigo de otros. Contra la tradición heredada, aceptada y transmitida del pueblo kurdo, la modernidad y moda pasajera de los progres. Al respeto a la familia, el clan y al pueblo de estos, la inadaptación de los otros, y el ataque a la familia e incluso el infanticidio.

Es paradógico pues que sea la izquierda, enemiga de tradiciones, antirreligiosa, amoral, abortista y libertina quienes amparen la lucha del pueblo kurdo.
El paradigma de Serokatil es único y por tanto muy diferente de otros socialismos. De hecho, dice no ser ni comunista ni capitalista, sino abanderar una tercera posición, transversal y de respeto a ideologías, nacionalidades, etnias y religiones. Lo que llama el confederalismo democrático.

Además del fenómeno ideológico único se suma la coherencia de la entrega altruista por ese ideal. Frente a la izquierda pacifistoide y cobarde, aburguesada como la derecha más rancia, de un Occidente eunuco, la gallardía de una guerrilla que prefiere morir de pie a vivir de rodillas, sometida a la opresión del turco, o del Nuevo Orden Mundial.

Son muchas pues las razones para un apoyo y sobre todo, para que sirva de espejo a los verdaderos movimientos revolucionarios europeos. Aquellos que defienden la justicia social, pero a la vez la herencia ancestral de la sangre, el suelo y la Fe de nuestros antepasados.

También sirva de ejemplo la coherencia de un líder que tras años de prisión sigue sin doblegarse. Es por líderes como éste e ideales igualmente firmes, por los que vale la pena luchar e incluso morir. Como así lo demuestran centenares y millares de guerrilleros dispuestos a todo.


Parece se acerca una gran confrontación civil en Turquia, entre el autoritarismo islamista de Erdogan, y el pueblo kurdo. No me cabe duda de con quién está la razón y además de con quién está Dios.

 

Simón de Monfort     

(Desde el frente de batalla, en la lucha contra el DAESH) 

 

Aquí tienes su página de Facebook desde la que narra su gesta    

https://www.facebook.com/Apoyo-Voluntarios-Españoles-contra-DAESH-811409822301358/