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Referendum independencia Catalunya

Cada día que pasa estamos más convencidos de que la sacralización de la democracia es uno de los hechos más nocivos que le han ocurrido a Occidente, y en particular a nuestra amada España. Elevar lo que no es otra cosa que un sistema político a una categoría superior a los Estados es, en primer lugar, un error conceptual de bulto, y en lo que se refiere a nuestro país, un acto de traición intelectual a la Patria. España es antes que la democracia, y si la democracia fuera buena lo sería sólo en la medida en que supiera conservar las mejores esencias de España.



Por eso, la encuesta que conocimos el pasado viernes, elaborada por el Centro de Estudios de Opinión de Cataluña, según la cual en una hipotética consulta sobre la independencia de esa región la mayoría de los catalanes votaría NO, es una engañifa más, una trampa más, un engañabobos para distraer al personal con la anécdota y conseguir que se olvide de lo esencial. Cataluña, como les he dicho en más de una ocasión, no puede ser independiente por la misma razón por la que no puede serlo un brazo o una mano respecto de un cuerpo humano: porque forma parte inseparable de él.

Pero desgraciadamente, como les decía antes, ha conseguido calar en la opinión pública la descabellada idea de que todo es negociable y discutible, de que todo se puede votar. Se ha conseguido convertir en verdad absoluta un disparate como es que cualquier idea, siempre que goce de un respaldo mayoritario, debe ser admitida por la totalidad de los individuos, sin que se puedan enfrentar a ese sumando razones de índole histórico, cultural, económico o político. O sea, con la misma rapidez con que hemos bajado a los santos de los altares, nos hemos apresurado a poner en ellos la democracia.

En este programa no nos consideramos antidemócratas. Creemos firmemente que, en el mundo de hoy, difícilmente son posibles regímenes totalitarios o autoritarios de tipo militar o unipersonal. La democracia sería, pues, el menos malo de los sistemas conocidos. Pero no cualquier democracia. No, desde luego, esta democracia parlamentaria liberal que discute la misma esencia de España. No esta democracia de partidos que discute hasta el más elemental de los derechos que es el derecho a la vida. Si esa es la única forma posible de ser demócratas, entonces evidentemente no lo somos en absoluto.

El resultado del sondeo publicado con evidentes fines propagandísticos por el gobierno de Artur Mas (con un 45,3% de los catalanes contrario a que Cataluña se convierta en un Estado independiente, frente a un 44,5% que se manifiesta a favor) lo único que pretende es que la mayoría de los españoles olvide que, en primer lugar, la soberanía reside en el conjunto del pueblo español y en ningún caso en una parte de él; y en segundo lugar, que la unidad de la Patria es sagrada y por lo tanto no se puede votar. Es la misma razón por la que no se puede votar que Dios existe.

 

Naturalmente, falta formación política en el pueblo español. Falta, en general, conocimiento de nuestra apasionante Historia y de los fundamentos en los que se basa una nación milenaria que ha sido espejo en el que se han mirado otros estados hoy más fuertes. Pero, sobre todo y especialmente, falta ese patriotismo elemental que no es partidista; un patriotismo que no es de derechas ni de izquierdas, sino que es tan humano como el amor filial o como el instinto de protección de un padre a un hijo. Es el patriotismo del que sabe que España no es un trozo de piel de toro, ni el suelo que pisamos, sino una unidad de destino en lo universal donde todos cabemos con la única condición de que todos estemos dispuestos a pelear por ella.

 

Y hoy pregunto a los oyentes: ¿Creen que se debe permitir la celebración de un referéndum separatista ahora que se sabe que la mayoría de los catalanes votaría NO a la independencia?

 

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Rafael Nieto es el director del programa de debate “Sencillamente Radio” de Radio Inter de Madrid (programa que se emite todos los domingos de 08:30 a 11:30 horas en esa emisora en el 918 de AM, 93,50 de FM e Internet: http://www.gaceta.es/oir-radio-inter ), y en el que participan habitualmente distintos militantes del Sindicato TNS.